¡Felicidades! ¡Has encontrado EL vestido! ¿Y ahora qué?
¡Por fin ha ocurrido! Después de semanas de búsqueda en las redes sociales y de sábados recorriendo tus tiendas locales de moda nupcial, ¡has encontrado EL vestido!
¿Y esto es todo? Pues, no del todo.
Mientras que algunas novias pueden tener la suerte de salir de la tienda con la seguridad de que han encontrado EL vestido para el día de su boda, la mayoría de nosotras necesitamos un poco más de ayuda para conseguir el total look perfecto y el ajuste ideal.
Las pruebas y los arreglos
Si quieres que cada pequeño detalle de tu vestido sea más que perfecto, es probable que necesites algunos arreglos.
Quizá solo se trata de algo tan sencillo como acortar el dobladillo y añadir unos cuantos pliegues y fruncidos. O tal vez necesites arreglos más complejos para conseguir un ajuste perfecto en tu vestido de novia. Sea cual sea el caso, hay que considerar el tiempo que requieren los arreglos y volver a probarte el vestido, y cuanto antes se inicie el proceso después de haber elegido el vestido de novia, mejor.
La mayoría de las tiendas de novias cuentan con un servicio para llevar a cabo los arreglos de manera interna. Aunque tengas una modista de confianza, siempre recomendamos que hagas los arreglos en tu tienda de moda nupcial o en un taller que te hayan recomendado, ya que allí las modistas tienen experiencia con los tejidos delicados y finos y con las siluetas de los vestidos de novia.
En cualquier caso, una vez que hayas decidido los arreglos que necesitas, concierta una cita para probarte el vestido lo antes posible, ya que pueden llevar tiempo.
Los zapatos (y otros puntos que pasamos por alto)
La primera vez que te pruebes el vestido, lleva tus zapatos de novia, o al menos un par similar a los que llevarás el día de tu boda. No hace falta decir que la altura del tacón es importante para conseguir la longitud del dobladillo correcta.
La comodidad, por supuesto, es prioritaria: entre la ceremonia, el saludo a los invitados y el baile posterior, lo último que quieres es tener los dedos de los pies apretados.
En cuanto al estilo de zapato, déjate guiar por el vestido. Para un impresionante vestido sirena con encaje como el LILY, recomendamos un par de zapatos de salón clásicos en punta, quizás de satén o con adornos de encaje. Para un look más suave, de corte en A, como el AMA, recomendamos unas sandalias de punta abierta brillantes y con detalles de joyería. Y para un look poco convencional, las bailarinas planas pueden quedar muy bien con vestidos de estilo princesa como el WATERLEAF.
Independientemente de cómo avance tu proceso, deberías llevar tus zapatos de novia definitivos cuando te pruebes el vestido por segunda vez. Practica cómo caminar con tu vestido en la tienda y repítelo en casa para asegurarte de que el largo del dobladillo es 100 % a prueba de tropiezos.
Otra cosa que debes llevar la segunda vez que te lo pruebes es la ropa interior que vestirás en tu gran día. En esta fase se pueden corregir las líneas que causan estas prendas en el vestido. Ah, y cíñete a los colores neutros para tu ropa interior, como el nude o el blanco roto.
Crea tu total look con los accesorios
Antes de llevarte a casa tu vestido, decide los accesorios. Aunque siempre es más tentador dejar para mañana lo que puedes hacer hoy, aprovecha la experiencia de tu asesora nupcial y pídele que te sugiera cómo puedes completar el look de tu boda. Esto es muy importante para los vestidos de novia más informales, o para las novias que celebran una boda civil, ya que vestir un vestido de novia sencillo es todo un arte.
Un velo de novia sencillo puede transformar totalmente un vestido de novia informal o incluso looks menos convencionales, como un traje de pantalón de novia o un vestido de novia corto. Como mínimo, viste tu cabeza con una diadema brillante o un broche para el pelo. ¿O qué te parece añadir un cinturón llamativo a un vestido de novia minimalista?
Echa un vistazo a nuestra colección de accesorios para inspirarte, y sal de la tienda con tu vestido, accesorios y zapatos, y con más tiempo a tu disposición para todos los demás preparativos de los que te tienes que encargar antes de tu día soñado.
