Te mostramos cuándo empezar a buscar vestido de novia
No eres la primera novia en preguntarlo, y tampoco serás la última: ¿cuándo debo comenzar la búsqueda DEL VESTIDO?
Una advertencia para esas incorregibles que lo dejan todo para mañana: Los expertos nupciales sugieren que empieces a buscar tu vestido al menos de 6 a 9 meses antes de tu gran día.
¿Lo dices en serio? ¡Sí!
Tu vestido de boda, igual que tu prometido, es único. Cuando una novia encuentra el vestido perfecto se le ilumina la mirada, como si la hubiese alcanzado la flecha de Cupido. Es todo química. Y necesitas tiempo para encontrar la fórmula correcta.
Así que, ¿por qué dejarlo para el último momento?
Te dejamos con nuestras sugerencias sobre cuándo empezar a buscar vestido de novia.
Los dos primeros meses
¡Yupi! ¡Estás prometida! Ahora, baja de nuevo a la realidad; debes reservar el lugar de la boda. Nunca es muy pronto para hacerlo, exactamente igual que con la búsqueda de tu vestido. Es más, el estilo de la ubicación también afectará al estilo del vestido. Nunca llevarías unos vaqueros rotos al bautizo de tu sobrina, ¿verdad? Pues ten en cuenta que la mejor opción para una boda religiosa podría ser un romántico vestido princesa, mientras que para las bodas en la playa son ideales los vestidos de estilo boho. Abre bien tu mente y organiza toda tu inspiración en un tablón de Pinterest.
Pide cita
Vale, ya tienes reservado el lugar de la boda y has completado tu lista de deseos. Ha llegado el momento de pedir cita con tu tienda de moda nupcial.
Tienes que saber que: Una buena tienda de moda nupcial sigue las pautas de la alta costura tradicional. Con algunas excepciones, la mayoría de los vestidos que ves en los colgadores son muestras. El que tú elijas será confeccionado especialmente para ti, y ese proceso podría llevar entre 3 y 6 meses.
¿Has encontrado EL VESTIDO en tu primera cita? ¡Eres toda una afortunada! Muchas novias necesitan al menos un par de visitas antes de tomar una decisión. Planifica tus citas con antelación para que te puedan acompañar familiares y/o amigas. ¡Y asegúrate de que te hagan fotos y te graben con el vestido puesto! Es la mejor manera de saber que te sienta bien.
Llega el momento de la prueba
Cuando el vestido de tus sueños llegue a la tienda te llamarán para realizar una primera prueba. Idealmente, esto debería ocurrir al menos 6 semanas antes de la boda.
Durante la primera prueba se arreglan las costuras, el dobladillo y otros elementos para garantizarte un ajuste perfecto. Se trata de un arte llevado a cabo por las modistas de la tienda (o una persona externa de su recomendación) que puede resultar un poco agotador, ya que te pedirán que te muevas, te gires y pongas diferentes posturas, ¡pero es todo para conseguir la máxima comodidad y belleza! Sé sincera: si no te convence algo del vestido, dilo. Cualquier arreglo será cada vez más complicado según avanza el proceso.
La segunda prueba
La segunda prueba del vestido de novia te permitirá tener una idea mucho más clara de cómo te queda y cómo fluye con cada uno de tus movimientos. Trae tu lencería para asegurarte de que no queda a la vista ningún liguero o ninguna tira del sujetador (esto es especialmente importante si has elegido un vestido de hombros descubiertos o un vestido de estilo sirena) Y si todavía no has escogido tu velo o tus accesorios, ¡hazlo ya!
¡Recoge el vestido!
La mayoría de vestidos solo requieren dos pruebas, ¡por lo que podrás recoger el vestido entre una y dos semanas antes de la boda! La tienda lo guardará en una bolsa de tela protectora para que solo tengas que darle un repaso rápido con una plancha de vapor y... ¡voilà! Ya estás lista.